• Los servicios de salud sexual y reproductiva permiten a las mujeres y parejas tener el número de hijos que deseen, cuando lo deseen, y tener partos seguros y recién nacidos saludables; tener vidas sexuales saludables, libres del VIH y de otras infecciones de transmisión sexual (ITS).
• Los beneficios para la salud inmediatos de estos servicios incluyen menos embarazos no planeados, menores tasas de mortalidad y discapacidad en mujeres y recién nacidos, así como menor incidencia del VIH y otras ITS. Los beneficios a largo plazo varían desde mejoras en la solidez de las economías nacionales hasta mayores ahorros a nivel de hogares.
• En la última década, las regiones en desarrollo en general han alcanzado reducciones de la mortalidad materna e infantil y de la incidencia del VIH. Sin embargo, todavía hay enormes disparidades entre las mujeres más pobres y las que tienen una mejor condición económica, así como entre los países en desarrollo más pobres y los más ricos.
NÚMEROS DE MUERTES E INFECCIONES DEMASIADO ALTOS
• Se estima que unas 290,000 mujeres mueren cada año en los países en desarrollo debido a causas relacionadas con el embarazo y 2.9 millones de recién nacidos mueren en el primer mes de vida. Casi todas estas muertes podrían evitarse con una atención médica adecuada.
• Cerca de 1.5 millones de mujeres que viven con el VIH se embarazan cada año. Y aunque el recibir tratamiento para prevenir la transmisión de madre a hijo ha aumentado rápidamente en la última década, cada año, aproximadamente 130,000 infantes se infectan con el VIH durante el embarazo y parto. (Otros 143,000 se infectan más tarde, por medio del amamantamiento).
• Cada año, alrededor de 200 millones de mujeres se infectan con las siguientes ITS curables—clamidia, gonorrea, sífilis o tricomoniasis. La mayoría no sabe que está infectada y no recibe tratamiento ninguno.
MILLONES DE MUJERES CARECEN DE SERVICIOS ESENCIALES
• Para 2014, más de la mitad del total de mujeres en edad reproductiva en las regiones en desarrollo desean evitar el embarazo. Sin embargo, la cuarta parte de esas mujeres—225 millones—no están usando un método efectivo de anticoncepción.
• Los embarazos no planeados de estas mujeres, las cuales tienen necesidades no satisfechas de anticoncepción moderna, representan el 81% del total de embarazos no planeados que ocurren cada año en las regiones en desarrollo.
• Cerca del 43% de los 125 millones de mujeres que dan a luz cada año en las regiones en desarrollo no realizan el mínimo de cuatro visitas prenatales recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS); y el 34% no dan a luz en una institución de salud, lo que aumenta los riesgos para su salud y la de sus recién nacidos.
• Cada año, más de dos tercios (69%) de las mujeres que sufren complicaciones médicas durante el embarazo o parto no reciben la atención que necesitan. También, el 69% de los recién nacidos no reciben la atención que necesitan si tienen complicaciones durante o inmediatamente después del parto.
• Más de un tercio de los 1.5 millones de mujeres embarazadas que viven con el VIH no reciben tratamiento antirretrovírico para prevenir la transmisión del VIH a sus bebés.
BENEFICIOS DE SATISFACER LAS NECESIDADES DE SERVICIOS DE SALUD REPRODUCTIVA
• Proveer a todas las mujeres y sus recién nacidos los servicios que necesitan, apegados a los estándares recomendados por la OMS, resultaría en grandes beneficios para la salud en las regiones en desarrollo.
• Si todas las necesidades no satisfechas de anticoncepción moderna fueran cubiertas:
—los embarazos no planeados anuales disminuirían en un 70% (de 74 millones a 22 millones); y
—los abortos inseguros disminuirían en un 74% (de 20 millones a 5.1 millones).
• El impacto combinado del menor número de embarazos no planeados y la atención adecuada para todas las mujeres embarazadas y sus recién nacidos, cada año resultaría en:
—la disminución de muertes maternas de 290,000 a 96,000;
—la disminución de muertes de recién nacidos de 2.9 millones a 660,000; y
—la disminución de infecciones por VIH durante el embarazo y el parto de 130,000 a 9,000.
SE NECESITAN MAYORES INVERSIONES
• Satisfacer las necesidades de anticoncepción moderna de todas las mujeres en el mundo en desarrollo costaría $9.4 mil millones de dólares por año, un aumento de $5.3 mil millones del actual nivel de gasto en 2014.
• Una vez satisfechas las necesidades de anticoncepción, dar cobertura al total de necesidades de atención relacionada con el embarazo para mujeres y sus recién nacidos costaría $28.0 mil millones de dólares por año, un aumento de $13.8 mil millones. Este total incluye $4.2 mil millones (un aumento de $3.0 mil millones) para proveer consejería y pruebas de VIH a todas las mujeres embarazadas, así como pruebas para sus recién nacidos y terapia antirretrovírica para todas las personas que lo necesitaran.
• El costo adicional de dar tratamiento a todas las mujeres en edad reproductiva para las principales ITS curables—clamidia, gonorrea, sífilis y tricomoniasis —sería de $1.7 mil millones de dólares por año, un aumento de $1.4 mil millones.
LAS INVERSIONES SON COSTO-EFECTIVAS
• La satisfacción plena de las necesidades de anticoncepción moderna de las mujeres hoy en día redundaría en que las inversiones en servicios de salud fueran más económicas en general. Por cada dólar adicional invertido en la anticoncepción, el costo de los servicios de salud relacionados con el embarazo (incluida la atención al VIH para las mujeres y sus recién nacidos) se reduce en $1.47 dólares.
• Satisfacer las necesidades de atención materna y del recién nacido costaría $35.8 mil millones cada año, partiendo de los actuales niveles de uso de anticonceptivos modernos. Sin embargo, la plena satisfacción de las necesidades de anticoncepción moderna reduciría este costo a $28.0 mil millones, porque con menos embarazos no planeados, menos mujeres y recién nacidos requerirán servicios de salud.
• Proveer a todas las mujeres el paquete total de atención en salud sexual y reproductiva costaría $25 dólares por mujer en edad reproductiva en el mundo en desarrollo.
LOS GOBIERNOS Y LAS AGENCIAS DONANTES ESTÁN OBLIGADOS A ACTUAR
• Los fondos adicionales requeridos para satisfacer plenamente las necesidades de servicios de salud sexual y reproductiva provendrían de los gobiernos nacionales y de las personas que reciben los servicios—los que en conjunto cubren actualmente el grueso de los gastos—y de los donantes y organizaciones no gubernamentales internacionales.
• Junto con proporcionar los aumentos en los gastos, los programas deben tomar en cuenta las mayores necesidades de los grupos de mujeres que viven en condiciones de pobreza y marginación, asegurar la calidad de atención, proteger la privacidad, promover las decisiones informadas y verificar que los servicios sean libres de toda forma de discriminación.
• Al considerar los objetivos de desarrollo para 2015 y los años por venir, los gobiernos y las agencias internacionales deben tomar en cuenta la necesidad de mayores inversiones en servicios clave de salud sexual y reproductiva. Estas inversiones son costo-efectivas; tienen enormes beneficios para las mujeres, familias y sociedad; y son pilares del desarrollo sostenible.
CRÉDITOS
La información contenida en esta hoja informativa ha sido tomada del siguiente informe, mismo que contiene información sobre fuentes de datos y metodología de estimación: Singh S, Darroch JE y Ashford LS, Adding It Up: The Costs and Benefits of Investing in Sexual and Reproductive Health—2014, Nueva York: Guttmacher Institute, 2014.
Esta hoja informativa fue posible gracias a subvenciones de UK aid, la Bill & Melinda Gates Foundation y el UNFPA. Sus hallazgos y conclusiones son de las autoras del informe que sirvió de base y no reflejan necesariamente las posiciones o políticas de los donantes.