Contexto
El embarazo durante la adolescencia se ha asociado con la experiencia de la maternidad temprana de las madres de los y las adolescentes; y se considera el nivel educativo de la gente joven como un factor importante en este fenómeno.
Métodos
En 2002, una encuesta representativa de hogares recolectó datos de 3,050 hombres y mujeres jóvenes de 20–24 años en tres ciudades brasileñas. Las principales medidas fueron la edad de la madre de los encuestados en el momento de su primer parto, la edad de la joven en el primer embarazo y la edad del joven al embarazar por primera vez a una pareja; los grupos de edad se dividieron en menores de 20 y de 20 años o mayores. La distribución de las personas encuestadas (tanto por su propia experiencia reproductiva como la de su madre), se analizó en relación con varias características, y se valoró mediante regresiones logísticas las posibles asociaciones entre estas variables y la experiencia del embarazo.
Resultados
Treinta por ciento de las jóvenes reportaron haberse embarazado antes de los 20 años; y 21% de los hombres dijeron que eran menores de 20 años cuando su pareja se embarazó. De estos grupos, 34% de las mujeres y 31% de los hombres reportaron que sus madres habían dado a luz por primera vez a la misma edad. Tanto las mujeres como los hombres tuvieron mayor probabilidad de experimentar un embarazo temprano si su madre había tenido un hijo antes de los 20 años (razones de momios, 2.0 y 2.3, respectivamente). En las mujeres, esta asociación positiva desapareció en el modelo final, después de ajustar por nivel de educación, mientras que entre los hombres la asociación permaneció después de un ajuste similar (1.8).
Conclusiones
El nivel de educación de las hijas e hijos parece ser un factor importante en la repetición de la fecundidad adolescente a través de las generaciones. Se necesita esfuerzos para aumentar el acceso a la educación y para alentar a la gente joven a que permanezca en la escuela.