Contexto
En el África subsahariana, donde las tasas de violencia contra la pareja son elevadas, es crucial conocer la frecuencia del abuso y los patrones de riesgo conexos para asegurar la salud y el desarrollo de la mujer. La violencia contra la pareja en Tanzania no ha sido evaluada a través de una encuesta con base en la población.
Métodos
Con base en una muestra de hogares de mujeres de 20–44 años residentes en el distrito urbano de Moshi, en el norte de Tanzania, se llevaron a cabo entrevistas personales en 2002–2003. Entre las 1.444 mujeres que indicaron que en ese momento tenían una pareja, se indagaron sobre su experiencia de la violencia doméstica durante el transcurso de la vida y la ocurrida durante los últimos 12 meses. Se utilizaron análisis de regresión logística con múltiples variables para identificar los factores relacionados con la violencia contra la pareja.
Resultados
El 21% de las mujeres indicaron que, durante los últimos 12 meses, habían sido objeto de la violencia doméstica (por ejemplo, habían sido amenazadas con abuso físico, sujetas a actos de abuso físico o forzadas por su pareja a mantener relaciones sexuales); el 26% indicaron que habían sufrido esta violencia alguna vez, inclusive durante los últimos 12 meses. Las probabilidades de violencia aumentaban si la mujer había tenido problemas para concebir o si había dado a luz cinco o más veces (razones de momios de 1,9 y 2,4, respectivamente); si el cónyuge o pareja tenía otras parejas (2,0) o si contribuía poco a los gastos del hogar para ella y sus hijos (3,3); y si tenía solamente educación primaria (1,7).
Conclusiones
La desigualdad de género de las uniones sexuales está relacionada con la violencia contra la pareja. Las políticas y programas que tratan de que el hombre no culpe a la mujer por la infecundidad que sufre la pareja, que promueven las uniones monogámicas e incrementan el acceso de la mujer a la educación pueden reducir la violencia contra la pareja en los centros urbanos de Tanzania.