Contexto
Para hacer una predicción sobre las necesidades de servicios de anticonceptivos, los administradores de los programas de planificación familiar con frecuencia recurren a los niveles de la necesidad insatisfecha obtenidos de conformidad con las intenciones de reproducción. No obstante, no se ha prestado suficiente atención a las intenciones de las mujeres con respecto al usar un método como medida adecuada para establecer el nivel de demanda de la anticoncepción.
Métodos
Se realizó una encuesta en 1999, en una zona rural de Madhya Pradesh, India, entre una submuestra de mujeres que habían participado en la National Family Health Survey (NFHS) de 1992-1993. Se comparó las conductas reproductivas y del uso de anticonceptivos de las mujeres con sus intenciones que habían manifestado en la NFHS, y se realizaron análisis de regresión logística para estudiar la relación entre las variables socioeconómicas y demográficas y la incongruencia de la conducta demostrada.
Resultados
Entre las mujeres que eran fecundas y casadas en 1992-1993, el 29% de aquellas que tenían intenciones de tener hijos y el 61% de las que habían manifestado que no tenían intenciones de tenerlos, en 1999 no habían cumplido con sus intenciones. Además, el 51% de las mujeres que no se encontraban practicando la anticoncepción en el momento de la NFHS pero que planeaban hacerlo, en 1999 no habían cumplido con sus intenciones, y el 29% tampoco cumplieron con su intención de no usar un método anticonceptivo. Las entrevistadas que habían manifestado que tenían intenciones de no tener hijos y de usar un método anticonceptivo resultaron más proclives que las otras a utilizar un método en 1999 (63% contra 25-41%). La edad de la mujer y el historial de muerte infantil fueron factores claves relacionados con la congruencia entre las intenciones de las mujeres y sus conductas observadas.
Conclusiones
En la India, el uso de ambas, las intenciones en materia de anticonceptivos y en la reproducción, es un mejor variable predictiva de la demanda anticonceptiva que el uso de cada uno en forma independiente. Así, el uso de ambos probablemente resulte beneficioso a los planificadores de programas para poder calcular la demanda futura de servicios anticonceptivos.