Contexto

Debido a la creciente epidemia del VIH en el Africa Subsahariana, es necesario integrar con urgencia todos los esfuerzos que se realizan para prevenir el VIH y las infecciones transmitidas sexualmente (ITS) y la promoción del uso del condón, a los servicios de planificación familiar.

Métodos

Se introdujeron servicios de consejería en materia de doble protección—la protección simultánea contra el embarazo no planeado y el VIH y otras ITS—junto con la oferta del condón femenino en seis clínicas de planificación familiar en Ibadán, Nigeria. Para evaluar la promoción de la doble protección ofrecida por los proveedores, se observaron en forma estructurada la interacción entre las clientas y los proveedores, se llevaron a cabo entrevistas a los proveedores y recabaron estadísticas de servicios clínicos, además de otros métodos cualitativos y cuantitativos.

Resultados

Después de recibir capacitación intensa, los proveedores ofrecieron consejería sobre la doble protección a la mayoría de las clientas y demostraron el uso del condón femenino al 80% de las clientas nuevas observadas. Aumentaron significativamente las discusiones con clientas sobre su comportamiento sexual con su pareja, sobre la relativa capacidad de los diversos anticonceptivos para prevenir la infección del VIH, y sobre la manera de influenciar al pareja que use el condón. Igualmente, aumentaron los esfuerzos de evaluar el riesgo de las ITS. La interiorización por parte de los proveedores acerca de la importancia de la prevención del VIH/SIDA fue crucial para la promoción y mantenimiento de la iniciativa de la doble protección. Aumentó la compra de condones, desde el 2% de todas las visitas a las clínicas de planificación familiar en 1999 al 9% entre enero y junio de 2001. Este aumento se debió principalmente al aumento del uso del condón femenino, utilizado en forma independiente o junto a otros anticonceptivos.

Conclusiones

La integración de la consejería en materia de doble protección y el suministro del condón femenino en los servicios de planificación familiar parece ser una iniciativa viable; es igualmente posible la aceptación por parte de los proveedores de los objetivos de la doble protección. Si bien los proveedores y las clientas son un factor clave para transformar la planificación familiar para ofrecer servicios de doble protección, también la actitud y el comportamiento de los hombres deben ser considerados seriamente para lograr éxito con esta iniciativa de doble protección.