Contexto

Con el aumento creciente de los costos de los servicios de salud reproductiva, puede resultar beneficioso obtener información acerca de la forma que el personal de los programas utiliza su tiempo y sobre los períodos de inactividad que se podrían utilizar para absorber nuevos servicios a un costo mínimo.

Métodos

Los proveedores en Zimbabwe tomaron cursos de readiestramiento de tratamiento sindrómico de las infecciones del tracto reproductivo. Antes y después de los cursos, se llevaron a cabo análisis situacionales "mini" en varias clínicas para determinar cómo pasaron los proveedores su tiempo con las clientas. Se calculó la duración promedio de cada visita, así como el tiempo utilizado para analizar los riesgos, los exámenes pélvicos y la obtención de muestras para análisis en el laboratorio. Se realizaron estudios sobre el uso del tiempo para determinar la forma en que usaban su tiempo después de los cursos de readiestramiento, incluidos los servicios a las clientas, las actividades administrativas y el tiempo de inactividad.

Resultados

El tiempo promedio utilizado durante las visitas de las nuevas clientas fue más largo después del readiestramiento (27 minutos) que antes (20 minutos), y aumentó el porcentaje de las clientas que recibieron los diversos servicios de tratamiento sindrómico. No obstante, aun después del readiestramiento, los proveedores utilizaron menos del 40% de su tiempo con las clientas. Se observó que se disponía de una cantidad sustancial de tiempo inactivo a las primeras horas de la mañana y al finalizar la tarde. Si aumentara el número de clientas, aumentaría el tiempo utilizado con ellas y disminuirían los períodos de inactividad; en consecuencia, se reduciría el costo por concepto de trabajo de una visita a la clínica—en una clínica específica, esta reducción sería a casi la mitad. En general, el costo promedio de las visitas de planificación familiar por concept

Conclusiones

La reducción del tiempo inactivo de un proveedor (período de ausencia de la clínica, tiempo inactivo o de otra forma no productivo) en las clínicas de planificación familiar en el mundo en desarrollo podría aumentar la capacidad de los servicios con un mínimo aumento de su costo. No obstante, los proveedores que perciben bajos salarios podrían requerir incentivos financieros para aumentar su volumen de trabajo.