Contexto: El nivel de la actividad sexual y la incidencia de las enfermedades transmitidas sexualmente (ETS) son elevados entre los adolescentes de Nigeria, aunque es bajo el uso de los servicios de salud reproductiva. Es necesario disponer de información acerca de sus actitudes y experiencias a fin de diseñar programas que resulten atractivos a los jóvenes.
Métodos: Se realizaron 24 grupos focales de discusión de un sólo sexo en los que participaron jóvenes de entre 15 y 20 años que asistían a escuelas secundarias en la ciudad de Benín. Estas discusiones se centraron en el análisis de las percepciones de los adolescentes con respecto a la conducta sexual de sus pares, su conocimiento acerca de las ETS y los métodos que prefieren para prevenir y tratar las ETS.
Resultados: Los participantes percibieron que la actividad sexual es muy común entre sus pares. Asimismo, observaron que si bien la atracción física es la razón principal para iniciar las relaciones románticas (que pueden resultar en relaciones sexuales) el deseo de obtener beneficios materiales o financieros es la razón principal para tener relaciones sexuales. Los jóvenes tenían algún conocimento relativo a las ETS, especialmente el VIH y el SIDA, aunque muchos creían que las infecciones eran inevitables. Cuando adquirían una infección de una ETS, la mayoría recurría a los curanderos tradicionales; se mostraban poco proclives a procurar tratamiento médico debido a su elevado costo, a la lentitud del servicio y a la actitud negativa de los proveedores del servicio hacia los jóvenes y a que percibían una carencia de confidencialidad. Los participantes consideraron que las campañas publicitarias serían el mejor método para educar a los jóvenes con respecto a las ETS y al uso del condón.
Conclusiones: El uso de campañas de publicidad para educar a los adolescentes acerca de los peligros de observar una conducta riesgosa y sobre el uso del condón; la educación de los padres sobre cuestiones de salud reproductiva y sobre la comunicación que deben mantener con los adolescentes; la capacitación del personal médico para que ofrezca diagnósticos y técnicas de tratamiento de bajo costo; y el establecimiento de servicios atractivos para los jóvenes en los que se realce los aspectos de sensibilidad y confidencialidad, asistirían en la reducción de las conductas sexuales de alto riesgo y en el control de la diseminación de las ETS (incluidos el VIH y el SIDA) entre los jóvenes de Nigeria.